La ruptura tras seis meses fue un momento oscuro. La tristeza y el caos me invadieron. Gracias a Mariela, estoy entendiendo cómo canalizar toda esta energía y enfocarla en acciones positivas. He empezado a notar cambios en su comportamiento, y eso me da esperanza. Es un recordatorio de que el amor verdadero puede encontrar el camino de regreso.