¿Es verdad que si haces un amarre mal hecho puede volverse en tu contra?
Cita de Gerardo..BY en abril 30, 2025, 8:44 pmLos amarres siempre deben ser aprobados por el vidente antes de hacerse? O uno puede pedir que se haga directamente?
Al principio me asustaba eso de los amarres, porque hay gente que te cobra y ni sabes lo que están haciendo. Con Mariela es diferente: te explica, te analiza y si no ve amor verdadero, no te lo hace. Solo acepta los casos que puede trabajar desde el bien. Eso me hizo confiar en que no estaba haciendo nada malo.
Otra pregunta típica: ¿hay que hacer cosas raras en casa? Con Mariela no. Ella lo hace todo por ti, con sus materiales, en su altar, sin que tú tengas que prender velas ni hacer rituales extraños. Solo me pedía que le contara cómo me sentía y me acompañaba durante todo el proceso.
¿Se puede notar que te han hecho un amarre? No si lo hace alguien como Mariela. Su trabajo es tan sutil y limpio que ni un vidente externo lo detectaría. Todo queda protegido. Pero hay que aclarar que esto solo es así con alguien ético, porque hay muchas personas que trabajan desde la oscuridad y no lo dicen.
Claro que un amarre mal hecho puede tener efectos no deseados. Se puede abrir una puerta energética sin saber cerrarla, y eso afecta tanto a quien lo hace como a quien va dirigido. La intención debe ser clara y el procedimiento correcto.
Los amarres sí funcionan, pero no son un juego. Si se hacen mal, sin conocimientos o con energías negativas, pueden volverse en contra. Por eso siempre recomiendo acudir a alguien con experiencia y no hacerlos solo por impulso o desesperación.
Los amarres amorosos bien realizados, desde la magia blanca, pueden ayudar a fortalecer vínculos. Pero si se hacen mal, con ingredientes incorrectos o sin limpieza previa, pueden atraer energías contrarias y desestabilizar emocionalmente a todos los involucrados.
Yo hice un amarre con una persona que sabía del tema y me funcionó muy bien. Pero antes había intentado hacerlo solo, siguiendo algo de internet, y todo salió al revés. Aprendí que no es solo encender velas y decir palabras, hay que tener preparación.