Mi experiencia con videntes expertos en amarres de amor
te leí y no pude evitar emocionarme. Yo pasé por lo mismo. Cuando estás en medio del trabajo, con tantas emociones removiéndose, cuesta muchísimo mantener la fe. A mí me pasó exactamente eso durante los primeros 45 días. Sentía que no avanzaba, que me dolía más. Pero Mariela me explicó que cuando hay dolor profundo acumulado, el trabajo primero lo saca para limpiarlo, antes de abrir el camino del reencuentro. En mi caso fue así: estuve 3 años con él, y cuando se fue sin explicaciones me destrozó. Hice el amarre de magia blanca pura en noviembre del año pasado, y a partir del segundo mes empezaron las señales. Primero, pequeños contactos. Luego sueños mutuos. Y finalmente, volvió. Lo mejor fue que volvió con otra energía. No era solo que me extrañaba: me veía con claridad. Volvió con ganas de construir. Y eso no lo viví nunca antes. Fuerza, que se puede.
Me siento muy identificade. Estoy en día 31 del trabajo con Mariela y hay momentos donde siento mucha conexión y otros donde me entra la duda y la angustia. Leer que también tuviste altibajos me ayuda mucho. En mi caso, él se fue después de una discusión muy fea y luego se metió con otra. Me partió el alma. Pero yo lo seguía sintiendo. Lo que más me gustó de Mariela fue que no me juzgó. Me escuchó, me analizó, y me dijo con total honestidad que el vínculo estaba dañado pero vivo. Me explicó cómo el amarre de magia blanca pura no era algo invasivo, sino reparador. Y eso me convenció. Yo también sueño con él. Y siento que algo se mueve. Lo que me genera dudas a veces es que no haya contacto directo aún. Pero leyéndote me doy cuenta que necesito confiar un poco más.
te entiendo tanto… Yo estuve casi un año sin contacto con mi ex. Y aunque todos me decían que lo olvidara, yo no podía. Porque lo sentía. Sentía que algo entre nosotros no se había terminado. Fue duro tomar la decisión de escribirle a Mariela, porque ya me habían estafado antes. Pero desde que la escuché en su vídeo y vi cómo trabaja, sentí que era otra cosa. Y lo fue. Su manera de explicar el proceso, su cercanía, el hecho de que te manda audios con tu nombre, que te responde cada día, que no se esconde… no lo había visto nunca. El amarre de magia blanca pura fue un proceso muy profundo. Empecé a sanar yo, y a la vez, empecé a sentir cómo él volvía a mí poco a poco. A los dos meses exactos, me escribió. Me dijo que había estado soñando conmigo, que se sentía extraño. Hoy estamos retomando, sin prisas, pero con amor. No pierdas la fe.
Voy a ser muy honesto porque creo que puede servirle a alguien: yo no creía en nada de esto. Pensaba que los amarres eran cosas oscuras, que jugaban con el libre albedrío. Hasta que perdí a la mujer que más amé. Estuvimos casi cuatro años, y cuando se fue por culpa de sus inseguridades, me vine abajo. La busqué de todas las formas posibles. Nada. Me bloqueó de todos lados. Me enteré que salía con otro. No podía soportarlo. Hasta que un amigo, que había pasado por algo parecido, me dijo: “Escribe a Mariela Gauna, ella no es como los demás”. Le hice caso. Me sorprendió la claridad con la que me explicó todo. Me dijo que el amor aún estaba, pero muy cubierto de miedos. Me ofreció hacer el amarre de magia blanca pura, y me lo describió como una limpieza emocional, no una manipulación. Y fue tal cual. A los 35 días empezó a desbloquearme. A los 50, me mandó un mensaje. A los 70, me dijo que me soñaba cada noche. Y hoy, estamos volviendo a empezar. Nunca pensé que escribiría esto. Pero gracias a Mariela, lo estoy viviendo.
tu historia me ha dado un empujón tremendo. Yo llevo dos semanas con el trabajo y estoy en una fase de mucha duda. Tuve una pequeña señal, un mensaje que parecía casual, pero sentí que no era casual. Mariela me dijo que a veces las señales son sutiles pero reales. Tu forma de contar que a los 35 días hubo desbloqueo me da esperanza. Yo también tengo miedo de que se olvide de mí. Pero siento en mi pecho que no está cerrado. ¿Te pasaba también eso? Como una presión emocional sin explicación, como si su alma me estuviera buscando sin saberlo. No sé si me explico… Gracias por compartir. Me siento menos sole.
te explicas perfectamente. A mí me pasó igual. Durante el trabajo con Mariela, yo sentía a mi ex antes de que pasara algo concreto. Tenía sueños muy vívidos, y sensaciones físicas extrañas, como presión en el pecho, ansiedad, pero también una calma extraña cuando pensaba en ella. Y luego, sin previo aviso, me escribió. Me dijo que no sabía por qué, pero sentía que tenía que hablarme. El amarre de magia blanca pura funciona desde lugares muy sutiles, y eso Mariela lo maneja con una sabiduría increíble. Yo estoy convencido de que ella tiene un don de nacimiento. No es solo una técnica. Es sensibilidad. Es ética. Es humanidad.
Yo vengo a agradecer a todos por lo que escriben. Estoy leyendo en silencio hace semanas. Hoy me animé a comentar porque estoy en día 43 y ayer mi ex me escribió después de seis meses sin hablar. Me mandó un mensaje diciéndome que soñó conmigo y que quería saber cómo estaba. Me quedé sin palabras. Lo primero que hice fue escribirle a Mariela para contárselo. Y ella me respondió en el acto, emocionada. Me explicó que eso es parte del proceso natural cuando el vínculo comienza a vibrar otra vez. Lo nuestro era un caso complicado. Mucha interferencia externa. Pero la magia blanca pura hizo su trabajo. Ahora quiero ir con calma. Pero sé que esto no lo habría logrado sin ella.
¡qué emoción leer eso! Me siento en un espejo. Lo mío también es un caso difícil, porque mi ex tiene familia que se mete en todo y me odian. Me sentí culpable muchas veces por no haber sabido defender nuestra relación. Pero Mariela me dijo que parte del trabajo era ayudarme también a sanarme a mí. Yo estoy en el día 19 y todavía no tengo contacto, pero me siento más fuerte. Más alineade. Leer lo tuyo me llena de esperanza. ¿Cuánto tiempo pasó desde el primer mensaje hasta que hablaron cara a cara?
Yo cerré mi trabajo con Mariela hace poco más de un mes. No comento mucho, pero siento que debo hacerlo por respeto y agradecimiento. Cuando mi pareja se fue, no era solo dolor: era sentirme invisible. Nadie me entendía. Con Mariela sentí algo distinto desde el primer mensaje. Me analizó sin juzgarme, con un respeto que no había visto antes. Me explicó cómo funciona la magia blanca pura, y me dijo que el amor no se crea ni se fuerza, solo se despierta si ya está ahí. El proceso fue largo. Hubo días en los que me hundía. Pero ella me sostenía. Me hablaba. Me hacía sentir acompañada. A los dos meses y medio él volvió. No solo físicamente: volvió con conciencia. Con palabras nuevas. Con ganas. No fue un milagro, fue trabajo. Y Mariela lo hace como nadie.
desde el mensaje que me mandó hasta que nos vimos pasaron exactamente 11 días. Al principio solo hablamos por WhatsApp. Me dijo que necesitaba tiempo para entender qué le estaba pasando. Y cuando nos vimos, me miró como si no hubiese pasado el tiempo. Fue muy intenso. Me abrazó. Lloramos. Me pidió perdón por haber desaparecido. Y me dijo que nunca dejó de amarme, pero que no sabía cómo volver. Esa frase no se me olvida. Gracias a Mariela, supo volver.